Los músculos representan la parte activa de la locomoción del humano, con esto queremos decir que son los responsables de todos los movimientos que realizamos, y a su vez cumplen otra función igual de importante que es la de la estabilidad, tanto en movimiento como reposo y contribuyen a dar la forma externa al cuerpo humano.
Se dividen en:
- Músculos Voluntarios.
- Músculos Involuntarios.
Los músculos voluntarios son los que se contraen o relajan como y cuando el individuo lo desee, puede hacer movimientos bruscos y rápidos, o lentos y precisos de variada intensidad.
Los involuntarios son controlados por el sistema nervioso vegetativo, y el individuo no tiene poder sobre ellos y su funcionamiento, constituyen las paredes de vísceras como el aparato respiratorio, digestivo o circulatorio entre otros. Poseen movimientos lentos y son de baja intensidad.
Tanto los músculos voluntarios como los involuntarios tienen sus propias características y se pueden dividir en tres grandes grupos:
- Músculos Estriados.
- Músculos Lisos.
- Músculos Cardiacos.
Los músculos lisos quienes pertenecen al grupo de los involuntarios los podemos encontrar en las vísceras como el estómago o el esofago y en las arterias.
Los estriados son los más abundantes del sistema muscular y pertenecen al grupo de los músculos voluntarios, son los que contribuyen; como mencionamos con anterioridad; a la locomoción
El musculo que compone al corazon es del tipo estriado, pero a defierencia de estos es un musculo involuntario.
Cada músculo se compone en dos partes, una roja, blanda y contráctil que pertenecen al músculo propiamente dicho y otra blanquecina, fuerte y no contráctil que pertenece al tendón, estos últimos varían dependiendo su función y ubicación.
Por su forma, los músculos se clasifican en: largos, anchos y cortos. Los músculos largos son aquellos en los que la dimensión según la dirección de sus fibras sobrepasa la de los otros diámetros. Estos, a su vez, pueden ser fusiformes o aplanados, según el diámetro transversal sea mayor en su parte media que en los extremes (así, el bíceps es un músculo largo y fusiforme, mientras que el recto del abdomen es largo y aplanado).
Los músculos anchos son aquellos en los que todos los diámetros tienen aproximadamente la misma longitud (el dorsal ancho de la espalda). Los músculos cortos son aquellos que, independientemente de su forma, tienen muy poca longitud (los de la cabeza y cara).
Existe una definición más de los músculos u otra forma de clasificarlos, esta es la de los profundos y superficiales.
Los músculos superficiales están situados inmediatamente por debajo de la piel y, si bien en el ser humane son rudimentarios y escasos, están insertados, por uno de sus extremos, en la capa profunda de la piel. Alguno de estos músculos está en la cabeza, cara, cuello y mano.
La mayoría de los músculos profundos insertan sus extremos sobre los huesos del esqueleto. Algunos lo hacen en los órganos de los sentidos (músculos que mueven los ojos) y otros están situados más profundamente, relacionándose con la laringe, la lengua, etcétera.
Según su forma son llamados de diferentes formas, tenemos a los músculos fusiformes, planos, cortos, anchos, orbiculares y esfínteres. Según su función se encuentran, los flexores y extensores, quienes doblan y extienden, los abductores y aductores, quienes alejan o acercan y los pronadores o supinadores, quienes rotan hacia arriba o abajo
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